Kandinsky 30: Pictopoesía (Fotopoesía y Pictopoesía)

Libro: 'Kandisky 30. Pictopoes?a' de Luis Cruz-Villalobos. Publicado por NoteBook Poiesis en la Colecci?n VioletLine. Segunda edici?n del original publicado en 2013. "En este libro bons?i, de cuidadosa factura y versos a?reos, Luis Cruz-Villalobos urdi? treinta poemas breves inspirados en una de las obras de Kandindky, Trente, en la cual convergen esbozos de cromosomas y jerogl?ficos, formas geom?tricas en su pureza y en transici?n al ?mbito org?nico de un brote de albahaca o la notaci?n abstracta de una nota musical. Un alfabeto sinest?sico en blanco y negro que bien puede evocar las tablillas de barro en que los sumerios inscrib?an sus inventarios o lo que un cient?fico de nuestro siglo observa, mediante el microscopio, en una porci?n de tejido del coraz?n de un zorro. Estos poemas habitan esa zona del lenguaje en que las met?foras cumplen la funci?n de reunir las mol?culas disgregadas por la entrop?a a la que est? sujeta la materia. Cada poema remite y dialoga con cada una de las treinta teselas que componen la pintura, dise?ada al modo de un mosaico. De all? que el poeta denomine a este ejercicio pictopoes?a, intercalando las im?genes a los versos. Es as? como penetra en las resonancias incubadas en los trazos del pintor ruso, descubriendo la primera letra de su nombre, como una: "Letra callada / Gota sobre la piel / del cielo." Las letras, queda claro, no hablan por s? mismas, no levantan la voz, caen a trav?s de nosotros como una gota sedienta de sonido. Necesitan de un mensajero que despierte a la m?sica que llevan dentro. El conjunto insin?a la aventura sinuosa que experimenta el alma sobre la Tierra, desde el ?tero a las primeras palabras, la reproducci?n a las aulas del dolor y la boca de lobo de la muerte, hasta un final que es epifan?a y renacimiento [...] Los versos de Cruz-Villalobos juegan en el espacio liminal donde se conjugan los sentidos para crear una experiencia verbal prism?tica, traduciendo la alquimia sensorial mediante las pinceladas de versos diminutos y sugestivos: "La construcci?n / se inicia como sinfon?a / de los paisajes internos / Que comienzan a instalarse / como acuarelas / que van y vienen / Y no se detendr?n / hasta el ?ltimo final." El paisaje interior emerge como un buzo que vuelve a respirar tras aventurarse en las fosas marinas del subconsciente. El bot?n que trae consigo son los restos del naufragio y los sedimentos que decanta la experiencia diurna, amalgamados a sue?os y deseos, mareas an?micas y algo del polvo de la estela de ese cometa inubicable que es el esp?ritu. El viaje de ida y vuelta que es la vida misma. El objetivo? Acaso sea hacer vibrar las teclas del alma humana, como profes? Kandinsky." Alfonso Matus Santa Cruz (del Pr?logo).